Bueno... Tras estar desaparecido durante meses, he vuelto. Siento si he dejado a alguien en la estacada (kina, va por ti y por esas conversaciones que tuvimos para contrastar ideas y que tanto me sirvieron ). No obstante, me "he decidido" a volver y lo hago por todo lo alto. Con 2 temas que, en mi opinión, son de interés para cualquiera en nuestra situación
Por un lado quiero abordar un asunto del ámbito laboral que, cuando menos, os servirá para echaros unas risas al ver hasta qué punto llega la ignorancia de algunas "personas". Pero eso mejor lo pondré en otra parte del foro.
En el presente hilo quiero compartir una situación que, si bien al principio no pensé que llegaría, con el paso de los meses la he visto más cercana hasta que, al final, ha asomado a mi puerta.
Tras 6 años de relación, recién cumplidos el pasado febrero de 2013, mi novia y yo lo hemos dejado. Hemos decidido dejarlo, o más bien lo he decidido yo un poco por ambos. Me explicaré... Desde hacía bastante tiempo había notado en ella una merma de su interés hacia mí y, echando cuentas, descubrí que todo empezó cuando inicié mi tratamiento con la testosterona.
Por un lado se sentía atraída por mí por toda esa serie de cambios que las hormonas te producen (voz, barba, etc.)... pero hay otros que, por lógica, no existen (sigues teniendo pecho, genitales femeninos, etc.) y que le suponían una traba a la hora de ciertos momentos de intimidad. No obstante, y como bien se iba pudiendo, nos las apañábamos para subsanar esas trabas hasta que, finalmente, se hizo imposible.
Tras muchas charlas entre ambos me di cuenta del problema raíz: ella nunca ha aceptado la realidad de mi situación (que he nacido chica) ni de mi cambio, sino que se ha limitado a autoengañarse todo el tiempo. Pero claro... el autoengaño al final juega malas pasadas y... cuando me quitaba una camiseta ella esperaba no encontrar pecho de chica, y ahí estaba... cuando me metía a la ducha ella esperaba no encontrar genitales femeninos, y ahí estaban...
En resumen, SIEMPRE ha querido creer que estaba con un chico biológico en vez de con uno transexual, y ahora que las hormonas me aproximan más a lo que soy y me siento... hay ciertos elementos que aún faltan por cambiar, y que llevarán su tiempo, y a ella le supone un trauma.
¿Diría que estoy jodi...? Sí y no. Sí porque durante 6 años ha sido la chica de mi vida (y aún sigue siéndolo), la he querido como a nadie (y aún lo hago) y me resulta duro decirla "Adiós" después de tanto. Y no porque... siendo sinceros... creo que ni ella tiene por qué estar con alguien con quien se sienta "trabada/condicionada", ni yo tengo la necesidad de estar con alguien que no pueda aceptarme tal y como soy, o lo que he sido, y todo lo que ello conlleva.
En otro hilo mencioné aquello de que mi novia tenía sus más serias dudas acerca de si podría estar conmigo, teniendo hijos y demás, si al final no llegaba a operarme de abajo. A día de hoy sigue pensando lo mismo, así que le he pedido que de esas conclusiones saque la respuesta a lo nuestro. Dice que no ve futuro si no está a mi lado, pero ya la he dicho que tampoco lo tiene al mío. No sin que antes acepte TODO lo referente a mí.
Así que bueno... Ese es uno de los temas que quería compartir. Es triste, sobre todo después de esos 6 años, pero creo que a la larga los 2 saldremos ganando. Ella puede encontrar la felicidad con un chico bio, y yo con alguien que pueda aceptarme al 100% y sin sentir trabas. Ambas opciones, la suya y la mía, igual de respetables
Un abrazo...