Bueno hoy me apetecía escribir por aquí como me siento, hace tiempo que no publico un tema,pero hoy aunque nadie responda voy a dejar esparcidas algunas emociones. Quizás a alguien le sirva.
Acabo de llegar,he tenido la cita perfecta o más bien llevo todo este mes hablando y quedando con esa cita,sí evidentemente me refiero a una mujer,una mujer que desde el primer minuto en que la vi sentí que era diferente,especial. Esta noche,por fin le he confesado mi verdad, que soy un hombre sí pero no como ella imaginaba. Aún no sé si me ha dolido más su cara de decepción o su cara de tristeza...todavía es una pregunta que se queda en mi mente sin una respuesta clara. Y entonces todos los fantasmas que uno cree haber olvidado vuelven susurrándote la realidad incambiable...el amor sigue siendo esa ilusión inaccesible.
Ella se enfada con derecho porque he tardado un mes en decirle mi condición pero no he sabido explicarle que no quería que dejara de verme como el hombre que soy, bueno más o menos se lo he explicado pero ella me ha dicho que ha sido egoísta por mi parte. Y yo ahí ya no sé qué decir…y es verdad no quería despertar del sueño porque sabía que ella no podría amarme así y entonces quería alargarlo en el tiempo, parar cada momento de sus ojos en los míos,retener cada instante de su sonrisa junto a la mía,el brillo con que me hablaba. Ella como mujer que se sentía halagada y admirada por mí y me buscaba con tanta naturalidad .Yo quería estar así eternamente y por eso no encontraba el momento adecuado para decírselo,no quería que la magia acabara. No quería volver a la realidad en donde se nos recuerdan nuestras limitaciones que existen inevitablemente.A ella le gustaba el hombre que veía en mí y ahora ya lo ha dejado de ver.
Me queda la impotencia el sentimiento de vacío ,me queda la rabia y el dolor con esa chispa que va quemando por dentro que es como un pellizco que se va haciendo intenso y aprieta el corazón...