Llevo cuatro meses de hormonación y pensarlo me hace feliz. Todos los días cuando me levanto me miro en el espejo buscando algún nuevo cambio en mi físico y la verdad es que siempre me veo igual pero el hecho de pensar que por dentro todo está cambiando me hace sentir bien y alegre. Esto es lo que yo quería, lo que he tardado años en admitir (a veces me entra la tristeza por no haber tenido el coraje suficiente muchos años antes)pero es lo que siempre soñé desde muy pequeño, siempre supe que era distinto a los demás, por fin me dirijo hacia el hombre que siempre sentí dentro de mí, pero todavía me miro en el espejo y no me reconozco como tal (estoy en ese periodo de ambigüedad, mi cara es insoportablemente femenina) y algunas personas que me rodean me confunden con una chica y los que me conocen de toda la vida, aunque ya por fin estoy fuera del armario, también se confunden porque llevan media vida tratándome como una chica y es normal que les cueste asimilar mi cambio y todo eso también me entristece y me hace sentir una soledad tan solitaria, tan sola... porque en mi vida no conozco a más transexuales que a mí mismo (por suerte les tengo a ustedes pero es virtualmente, en persona no conozco a nadie más) y el mirar a mi alrededor y no reconocerme en otros te hace sentir más solo todavía. Es una especie de aislamiento involuntario que surge por la desinformación, por la incomprensión de tanta gente con la que me cruzo a diario. Antes, (antes del cambio) era mi secreto, era mi miedo, era mi propia negación, ahora es un "secreto a voces", ahora muchas veces soy como el mono de feria que todo el mundo mira con curiosidad. En ocasiones me cruzo con la intolerancia y los prejuicios del mundo y en otras ocasiones me encuentro con la conmiseración y supuesta comprensión y aceptación de otros, la verdad no sé qué es peor. Porque yo solo quiero ser invisible, ser ese punto entre la multitud, uno más entre otros con mis particularidades pero a fin de cuentas un ser más lleno de normalidad.
Sé que tengo que ser paciente pero reconozco que los cambios hormonales no es que sean lentos, siguen su proceso pero a mí se me hace eterna la espera e incluso a veces me entra el "pánico" cuando me da por pensar que: "Y si me quedo así, y si no me masculinizo más". Me gustaría poder vivir la transición lejos de todo y de todos y volver hecho un hombre pero no es posible, últimamente me estoy volviendo más solitario que nunca, más mío que nunca, no me apetece hablar,siento que no me van a entender. Si la gente supiera como nos sentimos solo por un segundo quizás todo fuera diferente.
Bueno es tarde y mañana trabajo, gracias por estar ahí, ustedes, al final los únicos que pueden entenderme...