Ciertamente una buena noticia. Esperemos que por fin la razón se impone sobre los conceptos retrogradas de algunos jueces.
Negar el derecho de visita de un padre a su hijo o imponer reglas para tales visitas como si el padre fuese un criminal es impensable en una sociedad de derecho moderna y democrática.
El hecho que Alexia sea transexual no le inhabilita en absoluto para ser un padre responsable y cariñoso con su hijo. Es mas, el sistema de visitas actualmente impuesto no solamente es pernicioso y vejatorio para ella, sino que al mismo tiempo lo es para el niño ya que a este niño se le niega el cariño y afecto de uno de sus papas.
Esperemos una sentencia favorable que además crea jurisprudencia ya que el caso de Alexia ciertamente no es un caso aislado.
Jean-Claude