Desearía ser una literata ilustrada, para dar fuerza pública al sentido de estos versos. Aunque por hoy no sea así, me satisface saber que dicha fuerza emana del ser y el sentir de tantas y tantos que como yo son personas anónimas con sentimientos similares.
De alguna manera me permito la libertad de tomarles la palabra para expresar el agradecimiento a tanta y tanta labor realizada y tan pocas veces reconocida.
A esa luchadora increíble
cuya expresión la enaltece,
siempre dispuesta y sensible,
virtudes que bien se merece.
A esa tenaz y constante
dama de sonrosados carrillos,
de mirada inquietante
de hermosos labios y brillos
A esa chica maravillosa
sin duda de buen talante,
cuya sensibilidad atesora
la dulzura de buena amante
A esa mujer preeminente
que su vida ha dedicado
a ilustrar mas de una mente
de todo aquel mal informado
A esa dama que en silencio
ha sufrido amargamente,
vejaciones y vilipendios
rebatidos hábilmente.
A esa trabajadora tenaz
que nunca pidió gratitud
cuyo tesón la ha hecho capaz
aún sumida en esclavitud
A esa compañera aguerrida
a quien se debe querer
curtida por la dura vida
desde que la vio nacer
A esa gentil sin igual
quisiera poderle decir
que siga su vida tal cual
pero con el mejor porvenir.
Y escribiendo desde el silencio,
te deseo este verso agradable.
Tómalo Carla como un premio,
por ser mujer, por ser admirable.
Marta Salvans i Solé