Estimados amigos y amigas:
Os transcribo la introducción al capítulo 8 de un libro que estoy leyendo: Néctar para el alma- de Kack Kornfiel y Christina Feldman. ED. OcéanoAmbar
Encuentro que no tiene desperdicio, disculpad la extensión.
"<center><b>Quién Juzga?</b></center>
Imagínate un mundo sin juicio. Sería un mundo sin odio ni discordia, sin marginación ni violencia. Nuestras relaciones se basarían en la aceptación, el perdón y la comprensión. No habría enemigos ni oponentes, ni se daría el rechazo ni el menosprecio debido al sexo, la religión ni la raza.
Todos llevamos dentro la importante facultad de juzgar y criticar. La utilizamos interior y exteriormente para comparar, discriminar y censurar. Con frecuencia, esta voz interior simplemente repite las palabras de alguien que nos juzgó en el pasado. Sin embargo, lo creemos y aceptamos, lo vamos pasando, dia tras día, generación tras generación. En muchos de nosotros, el juez o crítico interior es tan duro y desagradable, que sería imposible utilizrlo, excepto en los regímenes más crueles y punitivos, como por ejemplo, bajo las órdenes de Stalin o Idi Amn. Podemos ser muy severos con nosotros y con los demás.
El juicio es el refugio y el arma de l superioridad moral y del miedo.
Haciendo incapié en la debilidad de otros, reafirmamos una sensación de superioridad. Haciendo resaltar las imperfecciones de los demás, defendemos nuestro propio sentido de lo correcto. Nuestras opiniones son la expresión visible de nuestra desconexión y separación de los demás y de nuestros propios corazones. Son el origen del dolor, la marginación y la discordia.
Para comprender una opinión tenemos que experiementar qué surge del miedo, del temor religioso, económico y racial, así como todas ls inseguridades que tenemos y que de forma clara nos dicen si nosotros o los demás no somos lo suficientemente buenos. En la vida espiritual se nos enseña a transformar el juicio en amor y sabiduría. Antes de juzgar, pensemos en lo que dice Jesús: "Quién de nosotros no ha pecado?¿No tenemos que expulsar la viga de nuestros ojos antes de señalar la paja en el de los demás?".
(...)
Cuando dominamos la pequeñez de la mente racional, se nos pide que cuidemos de aquellas personas que se sienten confundidas, dolidas, temeross o furiosas, que entonces actúan de forma que dañan a otros. Se nos pide que sintamos interiormente la misma confusión y dolor y lo experiementemos todo con sabiduría y compasión.
Inevitablemente, nuestros juicios se abren camino a la acción. Cuando consideramos que una persona es inferior o despreciable, nos apartamos de ella. Cuando juzgamos que otra es atractiva y digna, la admiramos y vamos detrás de ella. Basándonos en que una persona no nos gusta, la rechazamos, mientras que una preferencia personal y una experiencia anterior se convierten en la base para relacionarnos con otra. Con frecuencia nuestros juicios se fundamentan en impresiones superficiales o en cosas que han pasado hace tiempo. La fuerza de nuestras opiniones crea un entorno interior que puede mostrar una gran falta de amabilidad y cariño.
Tal vez creamos que es necesario juzgar, que sin nuestras opiniones seríamos incapaces de distinguir entre lo correcto y lo incorrecto, el bien y el mar, ser digno y despreciable. Quizá pensemos que sin juicios estaríamos paralizados, al no tener una base sobre la que hacer elecciones, tomar decisiones, y progresar en la vida. Podríamos sentir que la falta de juicio nos privaría de los valores morales y éticos. Son cuestiones importantes para estudiar. ¿Que sucedería si no opináramos?
¿No es cierto que si fuérammos capaces de contenernos de juzgar, no tendríamos ninguna alternativa excepto apelar a una gran profundidad interior de claridad y comprensión para discernir la verdad en cada momento? ¿No es cierto que si dejamos de lado nuestra opinión del presente, que con frecuencia sólo son vestigios del pasado, nos tendríamos que sintonizar totalmente y en el mismo instante con cada momento? ¿Si prescindimos de la superficialidad de muchos de nuestros juicios, no veríamos con gran intensidad y comprensión? También es verdad que en esta intensidad y compresión descubriríamos nuevas dimensiones de humanidad, perdón y tolerancia.
La energía que emplea la mente racional basta para transformar el mundo. Es una energía que tenemos que volver a encauzar. El perdón, la tolerancia, la paciencia y el amor nos producen humildad. Nos recuerdadn que la persona que vemos ante nosotros somos simplemente nosotros mismos con otra forma, alguien que anhela el mismo amor, aceptación y bondad que la que anhelamos nosotros, que es capaz de sufrir el mismo dolor o rechazo, juicio y odio del que somos capaces nosotros.
Una de las primeras normas del corazón, un de las principales leyes de una vida espiritual, es que no importa lo que ocurra, nunca heches a nadie de tu corazón. Haz lo que sea necesario para protegerte a ti y alos demás de actuar peligrosamente, mete a la gente en la cárcel si es necesario, pero no los heches de tu corazón. Hay momentos en que todos hemos experimentado mucha confusión,dolor y miedo y, por ello hemos producido más confusión y dolor. ¿Nos corresponde a nosotros juzgar a los demmás en este mundo? Tal vez sea más inteligente introducir el espíritu del amor, paz y comprensión entre toda la confusión y el dolor.
A medida qeu vayas leyendo, refelexiona en los sentimientos de juicio y de superioridad moral que surgen en tu interior, igual que en todos nosotros. ¿Como se sienten, cómo los experimentamos realmente?¿Son agradables? ¿Tienen una naturaleza de sabiduría o verdad por sí mismos?¿O van acompañados del miedo?¿Nos dejan más apartados, aislados o asustados? Piensa en lo contrario. Recuerda los momentos de perdón y comprensión, la compenetración con la confusión y la lucha de los demás tan parecida a la nuestra. ¿Cómo desearias entonces tratar a otra persona?¿Que juicios podemos abandonar ahora mismo?¿Qué oportunidades tenemos para dejar de lado el pasado y volver a ver otra vez las cosas?¿Qué relaciones próximas se curarían al eliminar nuestros juicios?¿Hasta qué punto podemos perdonar a los demás y a nosotros mismos?"
Con amor,
Editado por - Glaukita on 12/05/2004 09:12:28